Wagner, (Wilhelm) Richard

(22 may. 1813, Leipzig, Alemania– 13 feb. 1883, Venecia, Italia).

Compositor alemán. Pasó su infancia entre Dresde y Leipzig, y en esta última ciudad tuvo sus primeras lecciones de composición; debido a su talento, su profesor rehusó a recibir remuneración. A su primera ópera, Las hadas (1834), le siguió La prohibición de amar (1836), cuyo estreno fue tan mal preparado que el evento fue un fiasco y desde entonces determinó no realizar producciones con escaso presupuesto. El éxito de Rienzi (1840) lo llevó a ser más audaz en El holandés errante (1843) y más todavía en Tannhäuser (1845). Atrapado en el tumulto político de 1848, se vio forzado a huir de Dresde a Zürich. Durante sus forzadas vacaciones escribió ensayos influyentes, en los que aseveraba que la música (siguiendo a G.W.F. Hegel) había alcanzado un límite después de Ludwig van Beethoven y que la "obra de arte del futuro uniría música y teatro en una Gesamtkunstwerk ("obra de arte total). En 1850 presenció la producción de Lohengrin y desde ya había comenzado su obra más ambiciosa, El anillo del nibelungo, un ciclo de cuatro óperas. La necesidad de unidad en obras de gran escala lo llevó al concepto del leitmotiv. Los sufrimientos de un amor adúltero con Mathilde Wesendonck hicieron que interrumpiera el trabajo de Siegfried, la tercera ópera del Anillo, y compuso una ópera acerca del amor prohibido, Tristán e Isolda (1859), la que además pareció romper con los lazos de la tonalidad. En 1863 publicó los libretos del Anillo, con una petición en demanda de apoyo financiero a la que respondió Luis II de Baviera, quien invitó a Wagner a Munich para que completara la obra. Entre fines de la década de 1860 y comienzos de la década de 1880, Wagner completó Los maestros cantores de Nuremberg, Siegfried, El crepúsculo de los dioses y el largamente diferido Parsifal, al tiempo que supervisaba la construcción del gran teatro para el festival a realizar en Bayreuth (1872–76), que sería dedicado a sus óperas. Por sus impresionantes obras, Wagner no sólo se convirtió en una de las figuras más influyentes y determinantes en la historia de la música occidental sino que además de la cultura occidental. A fines del s. XX su innegable estatura musical fue en parte desafiada por posturas fuertemente racistas y antisemitas expresadas en sus escritos, y cada vez más se han documentado rasgos de antisemitismo en sus óperas.

Richard Wagner, dibujo de Franz Lenbach, 1870.

Courtesy of Richard Wagner-Gedenkstatte, Bayreuth, Germany